Cómo pintar objetos impresos en 3D: Una guía completa para principiantes y profesionales (2025)

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Sí, por supuesto que puedes pintar objetos impresos en 3D. De hecho, es la mejor manera de transformar un objeto de plástico básico en una maqueta de aspecto profesional, un accesorio realista o una obra de arte personalizada. La diferencia entre una impresión sin terminar y una pieza terminada es enorme, y los métodos para lograrlo son fáciles de aprender para todos. Esta guía abarca todo el proceso, desde la impresión inicial hasta la obra maestra final sellada. Analizaremos los métodos probados que utilizan aficionados y profesionales en 2025, centrándonos en la técnica y los tipos de materiales, no en marcas específicas. Te guiaremos para que comprendas tus materiales, reúnas las herramientas adecuadas, sigas un proceso de pintura detallado paso a paso, aprendas técnicas avanzadas y soluciones a problemas comunes.

Comprender la pintura y las impresiones 3D

Antes de coger un pincel, es importante comprender las propiedades únicas de las superficies impresas en 3D. El material con el que se ha impreso y la naturaleza básica del proceso de impresión determinan cómo se debe abordar la preparación y la pintura.

El principal desafío, sobre todo con las impresoras FDM (Modelado por Deposición Fundida), son las líneas de capa. Como las impresoras FDM construyen los objetos capa por capa, el producto final tiene una superficie texturizada con finas estrías. Sin una preparación adecuada, la pintura no ocultará estas líneas; al contrario, las hará más visibles, dando como resultado un acabado poco profesional. El objetivo de la preparación es crear una superficie perfectamente lisa.

Materia material

Los distintos plásticos tienen propiedades diferentes que afectan a cómo absorben la pintura.

  • Pintar PLA (ácido poliláctico): Al ser el filamento más común, el PLA suele ser el más fácil de trabajar. Se lija bien y admite la mayoría de imprimaciones y pinturas. Sin embargo, su bajo punto de fusión implica que se debe tener cuidado de no generar demasiado calor por fricción durante un lijado intenso. Una correcta preparación de la superficie sigue siendo esencial para un acabado de calidad.

  • Pintura para PETG (tereftalato de polietileno glicol): El PETG es conocido por su resistencia y flexibilidad, pero su superficie es más lisa y químicamente resistente que la del PLA. Esto dificulta la adherencia de la pintura. Para el PETG, es imprescindible lijar bien la superficie con papel de lija y utilizar una imprimación de alta calidad específica para plásticos.

  • Pintura para ABS (Acrilonitrilo Butadieno Estireno): El ABS es un material resistente y a prueba de impactos que se lija muy bien. Si bien se puede alisar químicamente con vapor de acetona, este proceso requiere importantes precauciones de seguridad. Esta guía se centra en el método universal de lijado e imprimación, que funciona de maravilla en ABS y es una técnica más accesible para la mayoría de los usuarios.

  • Pintura con resina (SLA/DLP/MSLA): Las impresiones de resina tienen un punto de partida muy diferente. Son increíblemente lisas, con líneas de capa a menudo invisibles a simple vista. El principal desafío no es el lijado, sino la limpieza. La impresión debe lavarse cuidadosamente para eliminar cualquier resto de resina líquida sin curar y luego someterse a un postcurado completo bajo luz UV. Cualquier resto de resina dejará una superficie pegajosa e impedirá que la pintura seque o se adhiera correctamente.

Tu kit esencial de pintura

Reunir los materiales adecuados con antelación hará que todo el proceso sea más sencillo y seguro. Nos centramos en las categorías de herramientas que necesitará, no en nombres de productos específicos.

Seguridad ante todo

Este paso es indispensable. Trabajar con partículas finas de polvo y pintura en aerosol requiere protección.

  • Protección ocular (gafas)
  • Mascarilla respiratoria (apta para partículas durante el lijado y vapores orgánicos durante la pintura con pistola)
  • Guantes de nitrilo
  • Un espacio de trabajo bien ventilado (un garaje con la puerta abierta, un espacio al aire libre en un día tranquilo o una habitación con ventilador).

Herramientas para la preparación de superficies

  • Cúter y alicates de corte al ras: Para la limpieza inicial de soportes, bordes y otros defectos de impresión.
  • Papel de lija: Es esencial contar con una variedad de granos. Comience con granos gruesos (por ejemplo, 120-150) para eliminar las marcas principales, pase a granos medios (220-400) para un alisado general y termine con granos finos (600-1000+) para una superficie lisa como el cristal.
  • Limas pequeñas o limas de aguja: Muy útiles para lijar en esquinas estrechas y áreas detalladas donde no llega el papel de lija.
  • Masillas: Para perfeccionar la superficie. Una masilla de retoque es excelente para rellenar pequeñas muescas y arañazos. Una masilla epoxi de dos componentes es mejor para rellenar huecos o juntas más grandes si se trata de una impresión de varias partes.

Materiales de imprimación y pintura

  • Imprimación: El puente entre el plástico y la pintura.
    • Imprimación de alto espesor: Esta es la imprimación estándar para impresiones FDM. Es una imprimación espesa que rellena pequeñas líneas de capa y arañazos, reduciendo la cantidad de lijado necesario.
    • Imprimación/promotor de adherencia estándar: Una imprimación más fina que se utiliza para asegurar que la pintura se adhiera a plásticos lisos o como capa unificadora final sobre una imprimación de relleno.
  • Pintura: La elección depende de la aplicación y de su nivel de comodidad.
    • Acrílicos al agua: La mejor opción para pintar con pincel. Tienen poco olor, no son tóxicos y se limpian con agua. Son perfectos para trabajos de detalle.
    • Pinturas a base de esmalte o laca: Suelen encontrarse en aerosoles y proporcionan un acabado muy duradero y resistente. Requieren una excelente ventilación y un tiempo de secado prolongado.
  • Aplicadores:
    • Una variedad de pinceles sintéticos: Consigue una mezcla de pinceles pequeños de punta fina para detalles y pinceles planos más grandes para aplicar las capas base.
    • Un aerógrafo: Si bien representa una inversión, un aerógrafo es una herramienta de otro nivel. Atomiza la pintura para lograr capas ultrafinas y uniformes, y permite crear degradados y efectos suaves imposibles con otros métodos.

Suministros para acabado y sellado

  • Cinta adhesiva: Una cinta de pintor de baja adherencia es fundamental para crear líneas limpias y nítidas entre secciones de diferentes colores.
  • Barniz/capa transparente: Disponible en aerosol o para aplicar con brocha, esta es la capa protectora final. Se presenta en diferentes acabados: mate, satinado y brillante.

El proceso central: una guía de 7 pasos

Este proceso sistemático transformará tu impresión en bruto en una obra maestra terminada. La paciencia es fundamental. No te apresures en las etapas de preparación.

Paso 1: Limpieza inicial de la impresión

Una vez que la pieza impresa se haya separado de la plataforma de impresión, lo primero es eliminar cualquier estructura temporal. Retire con cuidado el material de soporte. Use alicates de corte al ras para cortar los puntos de unión lo más cerca posible de la superficie del modelo. Luego, con un cúter afilado, recorte con cuidado cualquier rebaba, protuberancia, hilo o borde restante. El objetivo es conseguir que la pieza impresa tenga su forma original, sin ningún defecto de impresión.

Paso 2: La búsqueda de la suavidad

El lijado es la clave para un acabado profesional. Aquí es donde invertirás la mayor parte del tiempo de preparación. Comienza con una lija de grano grueso, de alrededor de 120 o 150, y lija toda la superficie de la maqueta. Utiliza movimientos circulares o de vaivén, aplicando una presión uniforme para eliminar las líneas de las capas más pronunciadas.

Tras la primera pasada, limpie el polvo y pase a una lija de grano más fino, como la de 220. Lije toda la maqueta de nuevo. Repita este proceso, pasando progresivamente a granos más finos: 400, luego 600, e incluso más finos si lo desea. Cada nuevo grano elimina los arañazos del anterior. Para un acabado realmente superior, considere el lijado en húmedo con papel de lija resistente al agua en las etapas finales (grano 400 y superiores). Sumergir el papel de lija en agua evita que se obstruya con polvo y da como resultado una superficie aún más lisa.

Paso 3: Llenado y refinado

Tras la primera pasada de lijado importante, es probable que encuentre pequeñas grietas, líneas de capa difíciles de corregir o hendiduras por la eliminación de soportes. Aquí es donde entra en juego la masilla. Aplique una capa fina de masilla de relleno en estas imperfecciones. Para grietas más grandes, utilice una masilla epoxi de dos componentes. Deje que la masilla cure por completo según las instrucciones; esto puede tardar entre 30 minutos y varias horas. Una vez curada, lije las zonas rellenadas con papel de lija de grano medio a fino hasta que queden perfectamente lisas e indistinguibles del plástico circundante.

Paso 4: La base crucial

Nunca omitas la imprimación. La imprimación cumple dos funciones cruciales: crea una superficie uniforme a la que la pintura se adherirá correctamente y resalta cualquier imperfección superficial que pudieras haber pasado por alto.

En un área bien ventilada, aplique una capa ligera y uniforme de imprimación de alto espesor. Deje que seque por completo. Ahora, inspeccione la maqueta bajo una luz brillante. El color uniforme de la imprimación hará que cualquier pequeño arañazo o imperfección sea inmediatamente visible. Tome una lija de grano fino (400 o 600) y lije ligeramente estas áreas hasta que queden lisas. Limpie el polvo y aplique otra capa ligera de imprimación. Es posible que deba repetir este ciclo de imprimación y lijado dos o tres veces para lograr una base impecable. Este proceso paso a paso es lo que distingue los trabajos de pintura amateur de los profesionales.

Paso 5: Aplicación de la capa base

Con una superficie perfectamente lisa y preparada, ya puedes aplicar el color. Esta primera capa de color es la base. Si usas un aerosol, recuerda la técnica: mantén una distancia de entre 15 y 25 cm del modelo y aplica ráfagas cortas y controladas mientras deslizas la mano sobre el objeto. Es mucho mejor aplicar varias capas finas que una sola capa gruesa y goteante.

Si pintas a mano con pincel, diluye ligeramente la pintura acrílica con agua o un diluyente para evitar marcas de pincel. Aplica una capa fina y uniforme. La primera capa puede quedar irregular; es normal. Deja que seque por completo antes de aplicar la siguiente capa fina. Aumenta la opacidad del color gradualmente.

Paso 6: Detalles de capas y enmascaramiento

Una vez que la capa base esté completamente seca, es hora de añadir complejidad. Para secciones grandes de un color diferente, usa cinta de enmascarar de baja adherencia para cubrir cuidadosamente las áreas que deseas proteger. Presiona firmemente los bordes de la cinta para evitar que la pintura se filtre por debajo. Luego, aplica el siguiente color.

Para los detalles más finos, usa pinceles pequeños. Apoya las manos en la superficie de trabajo para mantenerlas firmes y aplica los colores de detalle con cuidado. En esta etapa, tu maqueta cobra vida. Tómate tu tiempo, diluyendo las pinturas y aplicando los colores en capas finas.

Paso 7: Proteger tu trabajo

El último paso es sellar la pintura. Una capa de barniz transparente protege tu trabajo de desconchones, arañazos, el desgaste por manipulación y la luz ultravioleta, que puede decolorar la pintura con el tiempo. El acabado que elijas —mate, satinado o brillante— influirá notablemente en el resultado final. Un acabado mate no refleja la luz y es ideal para texturas realistas como tela o piedra. Un acabado brillante refleja mucho la luz y es perfecto para coches, cascos o figuras con aspecto húmedo. El satinado es un acabado equilibrado y versátil.

Aplica la capa transparente con la misma técnica que la imprimación en aerosol: 2 o 3 capas ligeras y uniformes, dejando secar bien entre cada una. Una vez que la última capa esté seca, tu obra maestra estará terminada.

Sube de nivel: Técnicas avanzadas

Una vez que domines el flujo de trabajo básico, podrás explorar técnicas avanzadas para añadir un realismo y una profundidad increíbles a tus impresiones pintadas.

Aerografía para degradados impecables

Un aerógrafo es una pistola de pulverización en miniatura de alta precisión que ofrece un control inigualable. Atomiza la pintura en una fina niebla, creando capas excepcionalmente delgadas y suaves. Esto elimina las pinceladas y el efecto de salpicaduras que a veces se observa con los aerosoles. Sus principales ventajas son la capacidad de crear mezclas y degradados de color perfectos, mezclar colores personalizados con precisión y aplicar la pintura de forma tan fina que conserva hasta los detalles más delicados de la superficie.

Creación de realismo con la erosión

Una pintura impecable puede parecer artificial. El envejecimiento artificial es el arte de hacer que un objeto parezca usado, envejecido y parte de un entorno real.

  • Pincel seco: Esta técnica es perfecta para resaltar bordes y texturas en relieve. Sumerge un pincel plano en pintura y luego retira casi toda el exceso con una toalla de papel hasta que el pincel parezca seco. Desliza suavemente las cerdas sobre los detalles en relieve de tu modelo. La pequeña cantidad de pigmento restante se adherirá solo a los puntos más altos, creando un brillo natural.

  • Lavados: Un lavado crea sombras artificiales y resalta los detalles en relieve. Diluye una pintura oscura (el negro o el marrón son comunes) con agua o un medio especializado hasta obtener una consistencia líquida. Aplica esta mezcla con un pincel sobre una zona de la miniatura y deja que la capilaridad lleve el pigmento oscuro a todas las hendiduras. Tras un minuto, utiliza un pincel limpio y húmedo para retirar el lavado de las superficies en relieve, dejando la «suciedad» solo en los recovecos.

  • Desconchones y daños: Para simular un aspecto desgastado por la batalla, puedes añadir desconchones de pintura. Un método común es usar un pequeño trozo de esponja. Sumerge ligeramente la esponja en pintura metálica o de imprimación oscura, retira el exceso y presiónala suavemente sobre los bordes y esquinas de la miniatura, donde el desgaste se produciría de forma natural. Esto crea un patrón de desconchones aleatorio y realista.

Solución de problemas comunes

Incluso los pintores experimentados se encuentran con problemas. Aquí encontrará soluciones a los problemas más comunes.

Problema: Pintura descascarada o que se desprende

  • Causa y solución: Esto casi siempre se debe a una preparación inadecuada de la superficie. Probablemente el plástico no se limpió o, más comúnmente, no se imprimó. La pintura no se adhiere bien al plástico liso y sin tratar. Debe eliminar la pintura descascarada, limpiar a fondo la maqueta para eliminar cualquier resto de aceite, lijar ligeramente la superficie y aplicar una imprimación adecuada antes de volver a pintar.

Problema: Líneas de capa visibles

  • Causa y solución: La preparación de la superficie se realizó con prisas. Una sola capa de pintura o imprimación no es lo suficientemente gruesa como para disimular las líneas de las capas. La solución consiste en preparar mejor la superficie. Es necesario volver a la etapa de lijado e imprimación. Aplique otra capa de imprimación de alto espesor, deje que seque y lije hasta obtener una superficie lisa. Repita el proceso hasta que la superficie quede uniforme.

Problema: Pintura líquida o que gotea

  • Causa y solución: Esto ocurre al aplicar demasiada pintura de una sola vez o al rociar demasiado cerca de la maqueta. Con aerosoles o aerógrafo, mantén la distancia recomendada y usa movimientos suaves y amplios. Siempre es mejor aplicar varias capas finas de color que una sola capa gruesa. Si usas pincel, es probable que la pintura esté demasiado espesa; dilúyela ligeramente.

Problema: Una capa transparente escarchada o turbia

  • Causa y solución: Se trata de una reacción al ambiente, generalmente causada por la aplicación de barniz transparente en aerosol con alta humedad o bajas temperaturas. La humedad del aire queda atrapada en la capa que se seca rápidamente, provocando un efecto turbio. Aplique siempre el barniz transparente en un área cálida, seca y bien ventilada. Si esto ocurre, en ocasiones, una capa posterior muy ligera aplicada en condiciones adecuadas puede disolver nuevamente la capa turbia y solucionar el problema.

Tu viaje comienza ahora

El secreto para un excelente acabado de pintura en una impresión 3D no reside en un producto milagroso, sino en la preparación paciente y metódica de la superficie. Lijar e imprimar no son tareas que deban hacerse con prisas; son la base sobre la que se sustenta todo el trabajo de pintura.

No tengas miedo de experimentar. Tu primer intento puede que no sea perfecto, y eso es fundamental para aprender. Te recomendamos empezar con una impresión pequeña y sencilla para practicar tus técnicas de lijado, imprimación y pintura. Con cada pieza, mejorarás tus habilidades. Con estos métodos, ya sabes cómo transformar cualquier impresión 3D, desde un simple trozo de plástico, en un objeto del que podrás sentirte realmente orgulloso. ¡Que disfrutes creando!

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