Introducción
Casi todos los aficionados a la impresión 3D han experimentado esta decepción: retiras una impresión de tamaño perfecto de la base y te encuentras con antiestéticas líneas onduladas en la superficie. Estas líneas son normales en el funcionamiento de las impresoras FDM (Modelado por Deposición Fundida), pero pueden hacer que una impresión, por lo demás excelente, parezca inacabada. La solución es una útil, aunque a menudo confusa, función del software de corte llamada "Planchado". Esta función está diseñada para eliminar estas ondulaciones, creando un acabado liso, casi profesional, directamente en tu impresora. Esta guía completa, actualizada a 2025, explica exactamente qué es el planchado en la impresión 3D, cómo funciona y cómo configurarlo en cualquier programa de corte moderno. Analizaremos sus ventajas e inconvenientes, cómo funciona con diferentes materiales y cómo solucionar los problemas más comunes para obtener una superficie superior perfecta.
1. ¿Qué es planchar?
Una simple comparación
Para entender qué es el planchado en la impresión 3D, piensa en una plancha doméstica común alisando las arrugas de la ropa. El calor y la presión de la plancha aplanan las fibras de la tela, creando una superficie lisa. En la impresión 3D, la boquilla caliente del cabezal de impresión actúa como la "plancha" para la capa final de plástico. Mediante calor y un movimiento preciso, transforma una textura irregular y con líneas en una superficie lisa y uniforme. Esto sucede automáticamente al finalizar la impresión, por lo que no tienes que hacer nada. Es un paso de acabado integrado en el proceso de impresión.
Cómo funciona
El planchado funciona combinando calor y una pequeña cantidad de material nuevo. A continuación, te explicamos qué sucede paso a paso:
- La impresora termina la última capa superior de su modelo de forma normal, depositando líneas paralelas de plástico.
- En lugar de alejarse para finalizar la impresión, el cabezal de impresión mantiene la boquilla exactamente a la misma altura que la última capa.
- A continuación, la boquilla inicia un segundo y cuidadoso pase sobre toda la superficie superior.
- Durante esta pasada, el calor de la parte inferior de la boquilla vuelve a fundir los pequeños picos de las líneas recién impresas.
- Al mismo tiempo, la extrusora expulsa una cantidad muy pequeña y controlada de plástico nuevo, denominada "flujo de alisado".
- El plástico recién fundido rellena los huecos entre las líneas originales. El movimiento de la boquilla caliente alisa este material fundido sobre la superficie, uniendo los picos y los huecos rellenados en una capa lisa y uniforme.
(Indicador visual: Diagrama que muestra una sección transversal de la capa superior. "Antes del planchado" muestra líneas separadas con picos y valles. "Después del planchado" muestra una superficie plana y uniforme).
2. ¿Deberías usar plancha?
Las ventajas de planchar
La principal razón para usar el planchado es la enorme mejora en la calidad de la superficie. Ofrece varios beneficios importantes:
- Apariencia impecable: Esta es la principal ventaja. El planchado transforma las capas superiores rugosas y rayadas en superficies lisas como el cristal. Esto mejora notablemente el aspecto de las maquetas, vitrinas, carcasas personalizadas y artículos decorativos, otorgándoles una apariencia más profesional y acabada.
- Elimina las líneas de la capa superior: Soluciona directamente uno de los problemas más comunes de la impresión FDM. Para piezas donde es importante una superficie lisa, el planchado es la mejor solución.
- Mejor tacto y funcionalidad: Una superficie planchada no solo luce bien, sino que también ofrece una sensación agradable al tacto. Esto puede ser útil para piezas que necesitan un contacto suave con otras piezas o que se manipulan con frecuencia.
- Sin trabajo manual tras la impresión: Conseguir un acabado liso sin planchar suele requerir horas de lijado, relleno y pintura. El planchado lo hace automáticamente, ahorrando mucho tiempo y trabajo. La pieza sale de la base de impresión ya terminada.
(Referencia visual: Fotografía comparativa de alta calidad, lado a lado, de dos impresiones idénticas: una "sin planchar" y otra "con planchado", que muestra la gran diferencia).
Los problemas del planchado
A pesar de sus ventajas, no se debe planchar cualquier estampado. Tiene inconvenientes que conviene tener en cuenta:
- Tiempo de impresión mucho más prolongado: El planchado se realiza lenta y cuidadosamente para permitir una correcta transferencia de calor. En impresiones con superficies superiores grandes y planas, esto puede añadir mucho tiempo al proceso total de impresión, a veces horas.
- Riesgo de problemas en la superficie: Si la configuración no es la correcta para el plástico y la impresora, planchar puede empeorar el aspecto de la superficie. Puede causar arañazos, grumos, exceso de material en los bordes o una textura áspera y derretida.
- Posibles problemas en la boquilla: La combinación de un movimiento muy lento y un flujo de material extremadamente bajo puede aumentar la probabilidad de transferencia de calor. El calor puede propagarse por el conducto del plástico, provocando que se ablande prematuramente y obstruya la boquilla, especialmente con plásticos sensibles a la temperatura.
- Resultados distintos con diferentes materiales: La eficacia del planchado varía mucho según el tipo de plástico. Lo que funciona a la perfección con PLA puede generar un resultado enredado con PETG. Cada material requiere ajustes específicos.
3. Cómo configurar la plancha
Cómo encontrar la configuración de planchado
A partir de 2025, la función de planchado es estándar en los principales programas de corte, como Cura, PrusaSlicer, OrcaSlicer y Bambu Studio. Suele encontrarse en el panel de configuración, en secciones como «Calidad», «Capas superior/inferior» o «Acabado». Si no la encuentra, la forma más sencilla es usar la barra de búsqueda del programa y escribir «planchado». Esto mostrará inmediatamente todas las opciones relacionadas.
Comprender la configuración clave
Para planchar correctamente se necesita equilibrio. Es importante entender la función de cada ajuste para conseguir un acabado perfecto en lugar de un desastre derretido.
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Habilitar planchado
Este es el interruptor principal para activar o desactivar la función. Muchos programas de corte permiten elegir entre "Todas las superficies superiores" y "Solo la superficie más visible". La opción "Superior" suele ser mejor, ya que solo suaviza la superficie visible final del modelo, ahorrando tiempo al no suavizar las superficies internas que quedarán cubiertas por más capas. -
Flujo de planchado (o tasa de flujo de planchado)
Este es probablemente el ajuste más importante. Controla el porcentaje de plástico extruido durante la pasada de planchado en comparación con la impresión normal. El objetivo no es imprimir una nueva capa, sino extruir la cantidad justa de material para rellenar los huecos entre las líneas de la última capa. Un buen punto de partida es entre el 10 % y el 15 %. - Demasiado alto: Provoca la acumulación de material adicional, creando una superficie irregular, áspera, con grumos y arañazos a medida que la boquilla se arrastra a través del exceso de plástico.
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Demasiado poco material: No sale suficiente material para rellenar los huecos. La superficie puede verse desprovista de tinta, irregular o igual que una impresión sin planchar.
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Velocidad de planchado
Este ajuste controla la velocidad de la boquilla durante el planchado. Debe ser lo suficientemente lenta para una correcta transferencia de calor, pero lo suficientemente rápida para ser eficiente y evitar problemas relacionados con el calor. Los valores habituales oscilan entre 100 y 200 mm/s. - Demasiado rápido: La boquilla se mueve demasiado rápido para que el calor pueda fundir y alisar la superficie eficazmente. El efecto de planchado será mínimo.
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Demasiado lento: Aumenta considerablemente el tiempo de impresión y el riesgo de sobrecalentar la superficie, causando problemas. También aumenta la probabilidad de acumulación de calor y obstrucción de la boquilla.
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Espaciado de líneas de planchado
Esto controla la distancia entre cada línea paralela de la pasada de planchado. Debe ser menor que el ancho de la boquilla para asegurar una cobertura completa. Un buen valor inicial suele ser de entre 0,1 mm y 0,2 mm. - Demasiado ancho: La propia pasada de planchado dejará líneas visibles en la superficie, anulando el propósito.
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Demasiado estrecho: La boquilla pasa repetidamente por la misma zona, lo que sobrecarga el plástico y puede provocar acumulación de material y un acabado rugoso. Además, alarga innecesariamente el tiempo de impresión.
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Patrón de planchado
Esto controla la dirección de las pasadas de planchado. Las dos opciones más comunes son Zig-zag y Concéntrico. - Zigzag: La boquilla se mueve de un lado a otro en líneas rectas y paralelas. Este es el patrón estándar y funciona bien para la mayoría de las formas.
- Concéntrico: La boquilla se mueve en círculos concéntricos, describiendo espirales hacia afuera o hacia adentro. Esto es ideal para modelos con superficies superiores circulares, ya que evita los cambios bruscos de dirección de un patrón en zigzag que pueden dejar marcas.
Puntos de partida recomendados
Estos ajustes constituyen un punto de partida seguro y fiable para materiales estándar como el PLA. Úselos como punto de partida y ajústelos según su impresora y el tipo de plástico que utilice.
| Configuración | Valor inicial recomendado |
|---|---|
| Flujo de planchado | 12% |
| Velocidad de planchado | 150 mm/s |
| Espaciado de líneas de planchado | 0,15 mm |
| Patrón de planchado | Zigzag |
4. Cómo funcionan los diferentes materiales
Guía de materiales
La eficacia del planchado depende en gran medida del tipo de plástico que se utilice.
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PLA (Ácido poliláctico)
El PLA es perfecto para planchar. Su punto de fusión relativamente bajo y su excelente estabilidad térmica permiten fundirlo y alisarlo fácilmente. Es el material más fácil de usar y el mejor para quienes se inician en el ajuste de la plancha. Crea un acabado brillante y liso. -
PETG (Polietileno tereftalato glicol)
Planchar PETG es posible, pero mucho más complicado. El PETG es muy pegajoso al fundirse y tiende a arrastrar el material por la superficie, causando arañazos y grumos. Para lograr un buen resultado, se requiere un ajuste preciso, a menudo con un flujo ligeramente menor y una velocidad mayor que con el PLA. Es fundamental mantener la boquilla muy limpia para evitar que el material se adhiera. -
ABS/ASA (Acrilonitrilo Butadieno Estireno / Acrilonitrilo Estireno Acrilato)
Tanto el ABS como el ASA funcionan muy bien con el planchado, creando a menudo un acabado mate y liso de aspecto muy profesional. Sin embargo, estos materiales requieren una impresora bien calibrada con cama caliente y una carcasa cerrada. El mayor tiempo de impresión que conlleva el planchado aumenta el riesgo de deformaciones y separación de capas si la temperatura alrededor de la impresora no está controlada adecuadamente. -
TPU y otros materiales flexibles
En general, no se recomienda planchar plásticos flexibles como el TPU. La presión y la fricción de la boquilla al pasar sobre la superficie pueden deformar fácilmente el material blando. En lugar de alisarlo, la boquilla tiende a arrastrar, estirar y rasgar la capa superior, creando un acabado muy deficiente. -
Materiales especiales (seda, madera, fibra de carbono)
Tenga mucho cuidado. Los plásticos satinados, apreciados por su brillo único, pueden perderlo y volverse opacos al plancharlos. Los materiales abrasivos, como los rellenos de madera, fibra de carbono o los que brillan en la oscuridad, aumentan el riesgo de obstrucción de la boquilla durante los movimientos lentos y de bajo flujo de aire al planchar. Además, aceleran considerablemente el desgaste de una boquilla de latón estándar.
5. Solución de problemas comunes
Tu guía para solucionar problemas de planchado
Cuando una plancha sale mal, los resultados pueden ser frustrantes. Aquí te explicamos cómo identificar y solucionar los problemas más comunes.
- Problema 1: Arañazos o hendiduras en la superficie
- Causas comunes: El flujo de planchado es demasiado alto, lo que crea un exceso de material que la boquilla arrastra. El desplazamiento en el eje Z también puede ser demasiado bajo, lo que provoca que la boquilla atraviese la capa superior.
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Soluciones: Disminuya gradualmente el ajuste de flujo de planchado (por ejemplo, un 2%). Compruebe la configuración de la primera capa y el desplazamiento del eje Z de su impresora para asegurarse de que la boquilla no esté demasiado cerca de la cama, ya que esto también puede afectar a la capa superior.
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Problema 2: Bordes irregulares o protuberancias en las esquinas
- Causas comunes: Esto suele indicar un exceso de material, que se produce cuando la boquilla reduce su velocidad para realizar un cambio brusco de dirección. La presión del plástico en el hotend no se está gestionando correctamente.
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Soluciones: La mejor solución es configurar el avance de presión de la impresora (para el firmware Klipper) o el avance lineal (para el firmware Marlin). Estas funciones gestionan la presión del extrusor con antelación. Algunos programas de corte también ofrecen la opción "Recuadro de planchado", que desplaza ligeramente la trayectoria de planchado desde el borde exterior para evitar que el material se derrame.
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Problema 3: La superficie parece deshidratada o sin cambios.
- Causas comunes: El flujo de planchado está demasiado bajo para cubrir los huecos. Otro problema importante es la humedad en el plástico. La humedad del plástico se convierte en vapor en el cabezal caliente, creando burbujas e impidiendo un flujo uniforme.
- Soluciones: Aumente el flujo de planchado en incrementos del 2 % hasta que la superficie se vea uniforme. Lo más importante es secar el plástico. Incluso el plástico nuevo puede contener humedad. Usar una secadora de plástico específica es una de las mejores medidas que puede tomar para mejorar todos los aspectos de la calidad de impresión, especialmente los acabados superficiales.
Consejo profesional para realizar pruebas
Para ahorrar tiempo y plástico, no pruebes la configuración de planchado en una impresión grande que dure varias horas. Descarga o crea un modelo pequeño y plano de "moneda de prueba": un disco sencillo de unos 20-30 mm de diámetro y unos pocos milímetros de alto. Imprimir solo la capa superior de este modelo con diferentes configuraciones de planchado te permite probar y ajustar rápidamente. Puedes probar una docena de configuraciones en el tiempo que tarda en imprimirse una pieza grande, encontrando rápidamente la configuración perfecta para tu material.
6. Comparación con otros métodos
¿Planchar siempre es lo mejor?
El planchado es una herramienta poderosa, pero es importante saber dónde encaja entre otras técnicas de alisado de superficies.
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vs. Lijado
El planchado es un proceso automático que solo afecta a las superficies horizontales superiores. El lijado es un proceso manual que elimina material y puede utilizarse en cualquier superficie de la pieza impresa. El planchado mantiene el tamaño original de la pieza, mientras que el lijado la modifica físicamente. -
vs. Suavizado con vapor (para ABS/ASA)
El planchado es un proceso seguro que se realiza dentro del programa de corte y que utiliza calor para alisar únicamente la capa superior. El alisado con vapor es un paso de posprocesamiento peligroso que utiliza disolventes químicos (como acetona para ABS) para fundir toda la capa exterior del modelo. Si bien el alisado con vapor afecta a todas las superficies, también puede ablandar o eliminar detalles finos, algo que no ocurre con el planchado. -
vs. Recubrimiento de epoxi/resina
El planchado mejora la superficie existente de la impresión sin alterar su tamaño. Aplicar un recubrimiento, como epoxi o resina UV, añade una nueva capa gruesa y duradera a la pieza. Esto modifica por completo las propiedades de la superficie, el tamaño y el peso del modelo. Los recubrimientos son excelentes para lograr resistencia y un acabado brillante, pero constituyen un paso adicional, laborioso y manual.
En resumen, el planchado es el método más integrado, accesible y preciso para obtener una superficie superior lisa directamente de la impresora 3D, sin trabajo manual ni procesos externos.
Conclusión
El planchado es una función revolucionaria del software de corte que ofrece una vía directa a obtener superficies superiores de calidad profesional en impresiones 3D FDM. Representa un equilibrio entre la promesa de un acabado increíble, casi profesional, y el mayor tiempo de impresión y la necesidad de una configuración meticulosa. No es una solución mágica que funcione a la perfección de inmediato, sino una herramienta potente que recompensa una pequeña inversión en ajustes. Una vez que la domines, elevará la calidad de tus impresiones a un nuevo nivel, eliminando uno de los problemas más persistentes de esta tecnología. Te animamos a comenzar con la configuración recomendada, usar un modelo de prueba para experimentar y descubrir el potencial para lograr acabados realmente perfectos en tus proyectos 2025.
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